TÚ ERES TÚ, NO LO QUE LOS DEMÁS DIGAN. 10 minutos diarios con Dios con MidaD

No eres más santo porque te alaben, ni más vil porque te desprecien. Las palabras de otros no cambian tu esencia. Lo que eres, eso eres; y por más que te estimen o te alabenlos hombres, no puedes ser ante Dios más grande de lo que eres. En otras palabra: Tú eres quien eres, no lo que los otros digan. Y sabe que el tú que Dios creó, tal como te creó es bello, con todo y sus defectos. Dios nos hizo con defectos para que tuviéramos algo en que ocuparnos tratando de ser mejores, y de esa manera mostrarle a él que lo amamos y lo queremos seguir con nuestro esfuerzo. Si miras lo que eres dentro de ti, no tendrás preocupación porlo que de ti hablen los demás. Es por eso que es un total auto engaño y dependencia esclavizanteel estar buscando las alabanzas de los hombres. De nada sirven, nada te garantizan y un día te la dan y otro te la quitan… Y otra cosa: Cuando te critican es una oportunidad para revisarte de descubrir si en algo de la crítica tienen razón; hay veces que si. Y si no la tienen pues solo te ríes de esa crítica, y no pasa nada… El hombre ve lo de fuera, más Dios el corazón. El hombre considera las obras, y Dios pesa las intenciones. Es verdad. Las acciones casi siempre son consecuencia de los pensamientos y la conciencia pero no siempre. Nos pueden engañar. Hay gente que sonríe para después matar mientras otros no sonríen pero te quieren ayudar. Dice un viejo adagio:  “nunca juzgues a un libro por su pasta” y de igual manera te digo: nunca juzgues a una persona por su apariencia, por su cara, por sus sonrisas o falta de ellas. Dice el dicho sabio también: “caras vemos corazones no sabemos”. A veces el muchacho más guapo o la muchacha más bonita es el de peor corazón, y viceversa.  No te engañes… Hacer siempre bien, y tenerse en poco, señal es de un alma humilde. El que no busca la aprobación de los hombres, claramente muestra que se entregó del todo a Dios. Porque dice San Pablo: No el que se alaba a sí mismo es aprobado, sino el que Dios alaba. 2 Cor 10: 18 Andar en lo interior con Dios, y no embarazarse de fuera con alguna aflicción, es estado de personaespiritual. Para qué buscas tanto fuera de ti; Todo lo que necesitas para estar en paz y feliz está dentro de ti.  No pierdas tu tiempo buscando dioses falsos, alegrones pasajeros, cariños perecederos. Abraza a Dios en tu interior, en tu “castillo interior” como le llama Santa Teresa y no necesitas más porque allí está él. Y como dice la misma Santa: “Quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta”.