SI NO EXISTE DIOS y LA VIDA ETERNA, ESTA VIDA NO ES MÁS QUE UNA BROMA CRUEL

Misioneros Del Amor de Dios - Missionaries Of God's Love - Podcast készítő MGL Misioneros Del Amor de Dios

Esta idea la plasma el gran escritor León Tolstoi en su obra CONFESIÓN, quien siendo un intelectual que dudaba de Dios y por eso cayó en depresión y hasta pensó en suicidarse, luego encontró el sentido y la alegría de la vida en la fe sencilla y gozosa de los humildes campesinos. Muchos otros escritores y un servidor estamos totalmente de acuerdo con su frase célebre. Yo lo expreso también de otra manera: SIN DIOS NO HAY UN PORQUÉ NI UN PARA QUÉ. Imagínate: En esta vida hay tantos esfuerzos, tantas limitaciones, tanto dolor algunas veces, tanto trabajar o juntar y para que luego todo termine en nada, en la muerte, y ya no hay nada…  Decía Tolstoi: eso sí que sería una broma estúpida y cruel. Con mucha razón los más grandes maestros de los ateos, los promotores del ateísmo como Friedrich Nietzsche , Karl Marx, Jean Paul Sartre y otros terminaron los últimos años de su vida sumidos en una total depresión, en el alcoholismo, fumadores empedernidos, usando  drogas, terminaron sus vidas en una condición miserable de soledad y desesperación…  Ellos son los que crearon y escribieron sus frases ateas famosas que tantos jóvenes ingenuos siguen hoy en día tratando de re-crear un ateísmo que se ha comprobado mil veces falso y engañador. Frases como “Dios está muerto, lo hemos matado” (Nietzsche), o “Las religiones son el opio de las masas” (Marx) o “La vida es un asco una náusea” (Sartre). Lo contrario a estas vidas ateas desesperadas y sin sentido es una vida llena del gozo, con la esperanza y el sentido de vivir que nos da la Fe, el vivir no solo creyendo sino en una relación personal, real e íntima con nuestro amado Jesús, con nuestro buen Dios; una vida también de unión con la familia de Dios que nos provee una buena Iglesia, en ella, no estamos solos, amamos y somos amados, aprendemos, somos motivados, conocemos más y más a Dios, nos servimos, nos comprendemos y nos ayudamos a crecer, a caminar y gozar la vida con todo y sus esfuerzos y luchas. Nunca nos cansaremos de repetir la frase sapientísima e inspirada de San Agustín en su libro LAS CONFESIONES, cuando le dice a Dios en el primer capítulo: “Nos hiciste Señor para ti; y no estaremos completamente felices y saciados hasta no tenerte a ti”. Porque nada puede llenar nuestros corazones más que Dios. Todos los anhelos de este mundo, sus placeres y riquezas materiales no son suficientes para saciar nuestra hambre de plenitud que solo Dios puede saciar. Dice el Génesis durante la narración de la Creación que a cada cosa que Dios creaba decía: “Y vio Dios que estaba bien” Gen 1, 12. 21. 25. En un estilo de parábola nos narra el Génesis que todo lo hizo Dios y que todo estaba bien. Pero notemos que DIOS CREÓ TODO, siempre ha estado y estará detrás de todo. Querer vivir sin Dios es como querer la lluvia sin  nubes, o que haya olas sin el mar, o que haya vida y calor en la tierra sin el sol. Querer vivir sin Dios es una aberración, una tontería, una necedad y una gran fuente de engaño e ignorancia. Eclesiastés 12:13El discurso ha terminado. Ya todo está dicho. Honra a Dios y cumple sus mandamientos, porque eso es el todo del hombre. (el sentido de la vida) 12:14Dios nos pedirá cuentas de cada uno de nuestros actos, sean buenos o malos, y aunque los hayamos hecho en secreto.