LA LUZ SIEMPRE VENCE A LA OSCURIDAD Y EL BIEN AL MAL

Una pequeña vela encendida es capaz de vencer a la negra oscuridad de la noche. Porque el bien es siempre más poderoso que el mal y al final siempre gana. Al que Dios quiere ayudar, no le podrá dañar la malicia de alguno. Si sabes callar y sufrir, sin duda verás el favor de Dios. Él sabe el tiempo y el modo de librarte; y por eso te debes ofrecer a Él. Algunas veces para fortalecer la humildad conviene que otros sepan nuestros defectos y los reprendan. Esto suena muy duro y difícil de aceptar porque más bien queremos que nadie nos critique, que nadie nos haga ver nuestros defectos pero poro eso no crecemos, por eso no somos más humildes, por eso no tenemos más a Dios. En la Iglesia tenemos a directores de ministerio y encargados de servidores para que nos guíen nos motiven pero también para que con caridad nos corrijan nuestros errores, ¿cómo vamos a crecer si nunca aceptamos la corrección? Recuerden la frase que hemos aprendido en MidaD: LOS HIJOS DE DIOS NO SE HACEN LOS SENTIDOS. Podemos agregar, los verdaderos discípulos de Cristo NO SE HACEN LOS SENTIDOS. Nadie somos tan perfectos que no necesitemos corrección, de hecho, ese es uno de los ministerios principales de un director espiritual, el guiarnos, corregirnos y enseñarnos.